¿No te has dado cuenta de que cada vez son más los «expertos» que quieren vender cursos online de marketing? Bueno, de marketing, de fotografía, de cómo ser influencer, de punto de cruz, de ser el dueño de tu destino y capitán de tu alma, etc. Pues esta vez voy a jeitear sobre ello. Más abajo también te doy algunos consejos a la hora de elegir e identificar los buenos.
Aclaración importante: En este artículo me voy a referir principalmente a la venta de cursos online automatizados, es decir, en los que no tienes al profesor en directo enseñándote. Esos me parecen geniales en su mayoría, porque permiten salvar las distancias y no deja de ser una enseñanza transmitida directamente, pero los automatizados… ¡ay los automatizados!
¿Por qué está creciendo esta moda? El siguiente punto te aclarará el porqué de este auge desmedido en el que a cada paso que das por «el internés», te intentan vender una de estas formaciones, todas ellas super guays, mega maravillosas con las que aprenderás virguerías.
Costes de crear un curso online automatizado
Ya lo habrás averiguado, pero resulta que… te grabas haciendo unos vídeos de cualquier tema y… ¡a vender!
Los costes de crearlo son sólo la primera vez, guión, rodaje, edición y montaje, lo puedes hacer tú mismo sin contratar a nadie. Luego como mucho tienes que moverlo en redes, poner algo de dinero para publicidad y captar leads (emails, teléfonos y datos de contacto para bombardear a tus posibles clientes).
No quiero entrar en detalles porque el tema es bastante complejo, pero existen sistemas de funnels o embudos de conversión, por los que, tras dejar tus datos, estarás en el punto de mira de ese vendedor durante un par de meses (todo ello automatizadísimo). Quizá más adelante haga un post al respecto, hay mucho que jeitear ahí.
Montado el sistema, conseguidas unas bases de datos de compradores potenciales, ya está todo hecho, a vender cursos online. Te lo puedes creer o no, pero es una auténtica máquina de vender churros, super rentable. El dinero que ganan con un par vendidos se reinvierte en publicidad y el resto son ganancias netas. Después, repetir proceso. Aluncinante, ¿no? Si no me crees sólo tienes que hacer un par de búsquedas en Google con «cómo crear curso online«. Te aseguran lo fácil que es y los pocos conocimientos que necesitas para montar el tuyo propio de loquesea.
Eso me lleva a una frase de mi querido amigo Gump…
¿Y qué tiene de malo vender cursos online?
Mi jeit va orientado más que al sistema, al objetivo y a la esencia de todo esto. No es una necesidad de enseñar o comunicar algo, es ganas de ganar dinero sin contar nada nuevo, porque créeme, que la mayor parte son cursos hechos de paja, con contenidos sacados de otros «expertos» que a su vez lo han sacado de otros «expertos».
Es aplicable a cualquier ámbito pero muchísimo más exagerado en marketing. Si perteneces al sector, sabes que tengo razón.
Quizá incluso seas uno de esos vendecursos y me odies en este preciso momento. Plantéate si el contenido que vendes merece la pena el dinero que van a invertir por él. Si es así, enhorabuena, mi jeit no va dirigido a ti.
Cursos online: luces y sombras
¿Es todo tan malo en el mundo de vender cursos online? No, querid@ jeiter, pero sí que es cierto que un gran porcentaje, alrededor del 85%, son una auténtica basura. He dicho un porcentaje a lo loco, pero ¿a que queda más creíble cuando alguien dice una cifra? Marketiiiing….
Bueno, que me desvío del tema. Hay profesionales increíbles que venden cursos verdaderamente buenos con los que aprenderás muchísimo, pero tienes que saber identificarlos bien.
En el siguiente bloque te voy a contar algunas pautas para que reflexiones un poco antes de pagar por uno.
Consejos para comprar un curso online
Éstos son unos pocos tips para que no te vendan gato por liebre al comprar un curso, sea de la temática que sea:
- Mira las opiniones y las reseñas de la gente, ¡pero ojo! no te lo creas todo. Por un lado, hay muchas opiniones compradas, que son bots, o de amiguetes, o de familiares, en plan «oye prima, ponme una reseñia aquí pa que me compren er curso este pofavorr…» y cosas así. Por otro lado, los embajadores, que son esos fieles seguidores del profesor/referente que aseguran que es la leche. Puede serlo o puede que simplemente no tengan el suficiente criterio o que están tan marketinizados por el susodicho que piensan que es algo de calidad, no siempre son una fuente fiable. Bueno, que me enrollo con este punto, resúmen: mira las reseñas pero de un modo escéptico y crítico, te puede dar muchas pistas.
- Las plataformas de venta de cursos no siempre son la mejor opción. No voy a dar nombres de cuales porque mi blog no va de eso, pero en algunas, los cursos son al peso y son una auténtica porquería. Producen contenido como churros, y eso siempre, o casi siempre, se traduce en mala calidad. A veces, el curso de Fulano, que no le conoce tanta gente, lo ha hecho más a conciencia, con más cariño y te aportará más que estos otros. Aclaro que no pasa en todas estas web de cursos, pero en general… buf.
- Elige siempre un curso presencial antes que uno online. Bueno, esto es algo muy personal, pero en mi experiencia, se aprende infinitamente más cuando asistes a una clase que cuando estás en tu casa «rascándotelas» mientras ves los vídeos del curso. Además, conocerás gente que está aprendiendo como tú, a los profesores, y puede que entables lazos profesionales y personales más fuertes. Eso sí, si no tienes tiempo, o se desarrolla en un lugar lejano, un buen curso online puede ser una gran opción.
Estoy viendo que hasta ahora, mi jeit es tal, que más que consejos para comprar un curso online, debería llamarse «¡No compres un curso online jamás!»… y tampoco es eso. Cambio un poco el chip e intento darte algún tip más constructivo…
Aspectos casi obligatorios para comprar un curso online
- Intenta apuntarte a cursos en los que los profesores tengan ciertas tutorías, consultorios o que puedas comunicarte con ellos y que estén incluidos en el pago. Que ellos sean accesibles de alguna forma. Suelen llamarse «Soporte de dudas» o algo así. Es un aspecto muy útil para que no te dejen abandonado ante posibles preguntas y necesidades que puedas tener a lo largo de las lecciones.
- Otra característica interesante suele ser el material incluido, por ejemplo, en el caso de algunos cursos de WordPress a veces te dan acceso ilimitado a plugins o plantillas muy útiles, que por separado te costarían un buen dinerete.
- Seguimiento de alumnos. ¿Acaba el curso y qué? ¿vas a seguir pudiendo preguntarle a tu profesor o pedirle consejo? Fundamental este punto.
- Certificación. Si es oficial mejor, aunque la mayoría no lo tienen por ser estudios no regulados. Al menos que puedas acreditar las horas que has invertido y que figuren los conocimientos impartidos. Así podrás ponerlo en tu curriculum y ser un poco más guay en Linkedin.
Reflexión final: Queridos hacedores de cursos online de paja, estamos ordeñando la vaca del marketing y la vamos a acabar matando entre todos. Vamos a intentar vender formación pero un poco más currada y sin tanto humo, haciendo las cosas mejor, sin abusos y sin tanta ambición ¿ok?
Y ya no se me ocurre nada más que contarte sobre comprar y vender cursos online. Me he quedado bastante agusto tras escribirlo, la verdad. ¿Me cuentas tu opinión al respecto en un comentario? Y si crees que estoy equivocado en algún punto, pues también.
Estoy buscando un curso online que me enseñe como monetizar y vivir dignamente de mi conocimiento pero hay tantos que no se cual escojer.
Me temo que no puedo ayudarte mucho más en eso, lo siento Andrés. Sólo decirte que los revises muy bien porque hay mucho curso online inútil por ahí.
Es súper difícil encontrar información en la red acerca de los vendehumos y este artículo me ha dado un pelín de fe en la Humanidad. Ya digo, solo un pelín 😛 Gracias por tu jeit porque realmente me he sentido menos sola.
Jajaj, muchas gracias Dama. No estás sola, «semos» muchos los que pensamos lo mismo. Ánimo y a hacer cosas buenas y bien hechas 🙂
Si si un poco tarde, lo sé…prácticamente 2 años desde que hiciste este comentario pero bueno es lo guay! Que internet es de hoja perenne:-)
Estoy al 100% con Dama y Jeiter, en cuento me meto a un vídeo de economía..Zas!! Me bombardean cursos de gurús que ganan tanto y cuanto. Como se me garantizarán que tras soltar 1.500 u2 mil ya tengo la vida resulta para vivir de la subastas, el trading o la compra de casas. Es un show! Y cuando hago los días de prueba ves que no hablan de fechas ni momentos ni eventos de nada porque les pondría fecha de caducidad al curso en cuestión.
Vete a saber cuando vayas a emplear esos conocimientos lo mismo están derogados y la nueva legislación los ha anulado. Me alegro de haber contactado con vosotros almas gemelas… capaces de filtrar y poder ver mas allá de la promesa platónica de vivir mejor trabajando menos, cosa que es difícil a no ser que la palmes y la gente vaya a ver tu tumba pagando, ahí si que ganas sin trabajar!!! Jejejeje
Un abrazo chic@s.
¡Nunca es tarde Jose Miguel! Fíjate que he visto tu comentario medio año después, pero toda la razón. Además, el humo de los cursos online parece que no ha desaparecido en estos años, sigue vigente, vino para quedarse, jajaj. Gracias por tu comentario y ánimo, siempre hay proyectos y gente lejos del humo. 🙂